Electroestimulación
La electroestimulación, también denominada ejercicio pasivo, es un tratamiento no invasivo cuyo fin es producir estímulos eléctricos que, colocados en las zonas que queremos tratar, tonifica y da firmeza a los tejidos del cuerpo. Además, estimula el sistema circulatorio permitiendo un mejor retorno venoso y linfático. De esta manera, ayuda a mejorar la retención de líquido, aumenta la circulación y elimina toxinas.
¿Cuál es el procedimiento?
El electroestimulador utilizado en nuestra clínica cuenta con diferentes programas de tratamiento que emitirán diferentes impulsos eléctricos según el objetivo a lograr. Los ejemplos más significativos corresponden a los programas lipolítico, de tonificación muscular, celulítico-reafirmante, de fortalecimiento, antiinflamatorio, analgésico o drenante. De esta manera, es posible actuar sobre la celulitis difusa y localizada, mejorar la flacidez y el tono muscular, y mejorar trastornos circulatorios como pesadez y edemas.
¿Qué zonas pueden tratarse mediante electroestimulación?
Las zonas idóneas para este tipo de tratamiento son abdomen, flancos, cartucheras, glúteos, brazos y pecho.
¿Cuántas sesiones de electroestimulación son necesarias?
Se realizan de 1-2 sesiones por semana con una duración de 20 a 40 minutos.
¿Tiene contraindicaciones?
Sí. Es una técnica muy segura, pero no debe utilizarse en personas con marcapasos o pacientes con epilepsia. Además, está desaconsejado su uso en la zona abdominal de pacientes embarazadas.